La única manera de hacer felices a los demás es hacer lo mejor para nosotros mismos...

sábado, 11 de diciembre de 2010

To be or not to be? That is the cuestion...

Ilusión. Alegría. Felicidad. Esperanza. Relax. Ser. Vivir. Sentir. Me siento agusto, me siento feliz, me siento bien, me siento relajada, tengo ganas de ilusionarme, de vivir, de ser... De muchas cosas. En parte estoy así porque acabo de terminar los exámenes, porque estoy relajada y porque vislumbro unas vacaciones cercanas que ansío y necesito. Pero, por otro lado, me siento así porque después de una época completamente por y para mí, ahora que vuelvo a dejar sitio para algo más, para alguien más, vuelvo a tener ganas de ilusionarme, de sentir, de ser, de vivir de tal forma que cuando mire atrás vea con alegría y felicidad todo lo que he hecho y no que mire atrás y vea con arrepentimiento que no he hecho nada. Porque hay que cambiar con nosotros mismos, que no nos podemos abandonar, que nos tenemos que cuidar siempre aunque no encontremos una razón para hacerlo, que a veces igual que nuestros padres por querer protegernos nos dicen lo que podemos y no podemos hacer, lo que debemos y no debemos hacer, como debemos y no debemos comportarnos,... Nosotros mismos, nuestro subconsciente, también hace esa función con la salvedad de que no la podemos desobecer, al contrario que a nuestros padres. Por ello, a veces por querer protegernos tanto nos olvidamos de que el verdadero sentido de la vida es vivirla, es ser y desarrollarnos, es sufrir y es aprender. Y no que por no sufrir dejamos de vivir, y entonces, ¿qué nos queda? Sólo seguir, hasta que alguien nos haga vivir y sufrir, otra vez, o hasta nadie haga nada y tú simplemente sigas, hasta que te das cuenta de lo que has hecho, de lo que estás haciendo y de cómo no puedes seguir así. Para encontrarte con que no es tan fácil volver a lo que rechazaste, y ver que aunque lo intentes, te sientes perdida y sola y piensas que todo cambió y que te dejó a ti ahí atrapada en ti, y ya en ese todo, no hay el sitio para ti. Ahora toca recoger esas fuerzas que tanta falta te hacen y que no sabes de donde sacar para luchar y pelear por volver a ese todo, a tu todo, a donde perteneces y de donde no tendrías que haber salido. Por último, tienes que saber que por mucho que te cueste el futuro, por mucho que sufras y por mucho que necesites atraparte en ti, no lo puedes hacer y tienes que buscarte otras formas de ser. Porque no hay que darle la razón a ese que dijo que el hombre es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra, que ya le has dado la razón varias veces, y lo tuyo es llevar la contraria (vas a ser más feliz).

No hay comentarios:

Publicar un comentario